Padre Shenan J. Boquet
Presidente
Human Life International

Un mosaico de amor

Hace pocos días, una editora proaborto de las redes sociales de uno de los principales periódicos en EEUU envió por Twitter un mensaje despectivo a las personas que defienden la vida: “Estimados amigos provida: ¿Qué ha hecho cada uno de ustedes *personalmente* para apoyar a las madres solteras de bajos recursos?” Luego añadió: “Esperaré [vuestra respuesta]”.

El sarcástico “Esperaré” dejó entrever el sucio juego. Sarah Tuttle-Singer (la editora de las redes sociales) creía que los provida no hacen nada para ayudar a las madres que lo necesitan. Supuso que con esta puntiaguda pregunta había puesto al descubierto de manera eficaz una presunta “hipocresía” en el corazón mismo del movimiento provida. Supuso que los provida no tenían con qué responder.

Se equivocó.

Como activista provida, enseguida aprendes a no hacerles caso a las acusaciones que,  sin fundamento alguno, lanzan personas como Tuttle-Singer. Pero hubo algo en su manera de expresarse y quizás en la prominencia de su posición en el mundo de los medios electrónicos, que captó la atención de la gente. La respuesta no se hizo esperar. Las personas provida comenzaron a llenar su cuenta de Twitter hasta el punto de que se hizo viral. En sus mensajes incluyeron breves descripciones de los sacrificios que personalmente han realizado para ayudar a madres jóvenes o en situaciones difíciles a tener a sus hijos.

Una persona comentó: “Doné un automóvil en buenas condiciones a un centro de ayuda a mujeres embarazadas”. Otra escribió: “He adoptado un niño con necesidades especiales… he donado a centros de ayuda a las mujeres, he realizado obras voluntarias para atender a estas mujeres y a sus familias en mi comunidad.” Todavía otra dijo: “He adoptado seis hijos, apoyado a muchas mamás que escogieron quedarse con ellos, en vez de darlos en adopción. Lo he estado haciendo durante años, porque es lo correcto”.

Y la lista sigue y sigue. En el momento de escribir este artículo, ya han sido enviados más de 13,000 cometarios en respuesta al tweet de Sarah [1]. Los mensajes detallan un vasto número de actos de caridad grandes y pequeños. Todos esos actos tenían como objetivo ayudar a mujeres embarazadas en situaciones difíciles. Muchas de estas personas son providas que han adoptado uno o más niños y les han proporcionado un hogar lleno de amor. El efecto total de esta sobresaliente cadena de comentarios es como un mosaico que constituye una pequeña muestra del amor, muchas veces no reconocido, que se ha ido acumulando día tras día. Se trata de un esfuerzo por hacer de este país, y de otros países, lugares más compasivos y amorosos para las mamás y sus bebés.

 

Nota:

[1]. https://twitter.com/TuttleSinger/status/1128739808178843649.

 

Continuará.